CANTA PAJARITO CANTA
Por: Melany Gonzalez
Había una vez una niña que vivía cerca de unos
grandes árboles llenos de nidos.
En un lindo nido nació un bonito polluelo,luego
un señor malo quiso cortar el
árbol donde vivía el polluelo.
El señor era tan malo que lo cortó. La niña miró
por la ventana tristemente, bajó su
cabeza y descubrió el pequeño en el
piso frio y solitario.
La niña le enseñaba cosas y el pajarito le cantaba,
mientras crecía deseaba un árbol donde vivir.
La niña lo sembró: el árbol crecía y crecía
y el pajarito se alegraba.
EL PODER TRANSFORMADOR
Por: Alexia Rodriguez
Cada ser humano lleva dentro de si mismo inmensas cualidades y pequeños defectos que con la ayuda de personas especiales como Tú pueden cambiarse por virtudes. Todos estamos llenos de amor y es esa magia la que nos hace diferentes y que de una o otra forma impregna la vida de los demás. Existe un gran poder transformador que puede hacer de nosotros lo mejor de lo mejor, de personas incapaces personas capaces, cambiar la tristeza por alegria, el llanto por una sonrisa, un poder que ayuda a encontrarle el lado bueno alas cosas, a nuestras dificultades, un poder que nos ayuda a aprender de nuestros errores. Es el poder transformador del amor de Dios , en cuyas manos, somos como el barro en mano del alfarero que poco a poco nos moldea y nos hace perfectos conforme a su voluntad, haciendo asi de nosotros su mejor obra de arte.
LOS PATITOS
Por: Melany Gonzalez
Tres patitos blancos
saben cocinar,
Debajo de un árbol
quieren amasar.
Con cuatro manzanas
y un poco de miel
hacen una torta
que esta ¡de chupar!
UN NOMBRE PARA NATALIA
Por: Alexia Rodriguez
Había una vez una niña a la que todos llamaban copito. Le decían así por que su piel era muy blanca y su cuerpo era redondito como un copito de nieve.
Aunque se veía muy tierna, su aparencia empezó a mortificarle cuando entro al colegio;allí, los niños y niñas se burlaban de ella tan pronto la vieron, y su apodo fue cambiando a repollo blanco. Esto le dolía a la niña por que sentía las intenciones de su compañeritos y compañeritas, era ofenderla.
Los días pasaron y copito o repollo blanco demostraba que era una persona amable con todos, siempre dispuesta a ayudar y comprender; cuando la miraba a sus compañeros o compañeras y les esbozaba una sonrisa.
Poco a poco la actitud tolerante y comprensiva de la niña, avergonzaba a las personas que querían ofenderla. Así , fue ganándose el respeto de quienes la rodeaba. En su casa le habían enseñado que enfrentarse o gritar no traía consecuencias positivas verdaderas. Ahora, todas y todos los de su clase le dicen "nati" a Natalia Londoño y después de dos meses de haber ingresado al colegio, le van hacer una linda fiesta de bienvenida.
UN NIÑO MAGO
Por: Maria Fontalvo
Era una tarde de invierno, y el niño mago estaba en el castillo, cuando de pronto tuvo un deseo grandioso y fue el rey del castillo, y como era el más grandioso del castillo fue un buen rey.
Los sueños también se pueden convertir en realidad.
